Salieron de la sala de ecografía, juntos abrazados.
-Va a hacer un varoncito, igualito a vos.-dice Paula riéndose.
Pedro se para adelante de ella y la besa.
-Te amo.-dice Pedro
-Te amo más mi amor.-dice Paula.
Llegaron a la casa, avisaron a sus familias de la gran noticia , era tarde y estaba apunto de llover, hacía mucho frío, prendieron la estufa a leña y se sentaron en el sillón, Giuliana ya estaba dormida en su cuarto, estaban ellos solos con Moro que ya casi entraba en el sueño sentado al lado del fuego.
Habían puesto una película, ya que Paula no trabajaba al otro día y Pedro no tenía ensayo.
La película terminó a las doce de la noche estaban los dos abrazados y Paula casi dormida.
-No te me podes dormir ahora!.-dice Pedro sonriendo.
-Ah no? por qué?
-Porque tenemos que hablar muy seriamente.
Paula se reincorpora en el sillón.
-Que pasó gordo?.-dice Paula.
-Tenemos que hablar de nuestro hijo... digo el nombre.
-Ay gordo, es eso... si es verdad!.-dice Paula.
-Bueno que nombre te gusta?.-dice Pedro.
-No se.. Luca me gusta...
-Ay Pau ! igual que el perro ?.-dice Pedro.
-Ay si tenes razón, Matías?
-Na, muy típico.
-Bueno, no se, decí vos!
-A ver... Jacinto?
-Ay Pedro, tas loco? vas a arruinar la reputación del nene.
-Ya se gorda, te estaba jodiendo!.-dice Pedro.
-A ver...
-Ya se !.-dice Pedro.
-Cuál?.-dice Paula.
-Ian , me gusta ese nombre?
-Ian Alfonso Chaves, suena tierno.-dice Paula riéndose.
-Entonces Ian?
-Ay si me encanta amor! .-dice Paula y lo besa.
-Vamos a dormir?.-dice Pedro
-Si vamos...-dice Paula.
Se fueron a dormir, al otro día, Pedro se levanto a las 11 y dejó que Paula durmiera un poco más.
Cuando ella se despertó fue al living y Pedro la estaba preparando con el desayuno.
-Buen día gordo...-dice Paula.
-Como estas?-dice Pedro.
-Bien, Giuli?
-Está en el fondo jugando ...
Giuliana hacía tres meses que había empezado a caminar, ya lo hacía bien y ya faltaba poquito para su primer año.
-Ay Pedro, la dejaste sola? está la piscina mirá si se cae...-dice Paula yendo a buscarla.
-Ay Pau, está al lado de la puerta jugando con Moro la ves desde acá .-dice Pedro señalándola.
Paula la miró como para asegurarse y se sentó a desayunar.
-Que hacemos hoy?.-dice Paula.
-Estas activa?.-dice Pedro.
-Si, quiero hacer algo, no se, salir...digo, no te tengo todos los días, te tengo que aprovechar.
-(Riendo) Bueno, está bien.
Pasaron algúnas horas y salieron a almorzar a un restaurante del viejo barrio de Paula, Las Cañitas. Pararon el auto en una esquina, para ellos, la cuadra en la que pasaron más cosas, allí a mitad de cuadra estaba el viejo apartamento de Paula, aquel donde comenzó todo, donde pasó todo, Paula bajó del auto y quedó mirando el edificio, quedó dura.
-Pau ... Paula!.-dice Pedro.
-Ah, que?.-dice Paula.
-Estás bien?-dice Pedro.
-He si...
Pedro se dio cuenta que Paula había cambiado la cara estaba rara, pálida como triste.
-Segura?
-Pedro..
-Que?
-Quiero entrar... quiero ver mi casa.
-Pero Pau, no podemos hay gente...
Paula se aleja entrando al edificio, Pedro saca a Giuliana del auto, cierra y corre atrás de Paula.
-Pera Pau...-dice Pedro
-Hola.-dice Paula hablándole al portero.
-Paula!.-dice el portero sorprendido.
-José, como estas? dándole un abrazo.-dice Pedro
-Muy bien, veo que ya formaste una familia .-dice José viendo entrar a Pedro con Giuliana.
Se saludaron y hablaron un ratito.
-Bueno y que los trae por acá?.-dice José
-José, no se, pero ... puedo ver mi apartamento.
-Está en venta Paula...
-En venta?.-dice Paula sorprendida.
-Si, tuviste suerte de que tengo la llave.
José era el portero del edificio desde hacia ya 23 años, un hombre humilde, de familia, educado y muy amigable.
Le dio la llave a Paula.
-Gorda, andá vos .. yo me quedo con Giuli.
-Bueno.
Paula subió por el ascensor, mientras abajo Pedro y José hablaban.
-Andá Peter...-dice José.
-A donde?.-dice Pedro
-A acompañar a Paula, dejame a la nena yo te la cuido, vos andá con ella...
Pedro subió, la puerta de el apartamento estaba abierta, él entró, estaba todo tan cambiado, habían tirado una pared abajo, cambiado muebles, los pisos y varias cosas, estaba vacío.
Pedro vio que Paula estaba parada, se acerco a ella por atrás y la abrazó, su cara estaba húmeda, pudo notar como algunas lágrimas recorrían su rostro, su respiración entrecortada.
CONTINUARÁ
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