" El poder del amor" Capítulo 101 - Todo lo que va vuelve.

-Para Pau...-dice Pedro.
Paula para de besarlo y lo mira.
-Para Pau que? recién casi me sacas toda la ropa ahí afuera y ahora me decís que pare.
Pedro se empezó a reír.
-De que te reís tarado?.-dice Paula también riéndose.
-De vos, cuando te pones así loquita me da mucha gracia.-dice Pedro.
-Ah mira vos, está bien, entonces me voy a dormir tranquila.-dice Paula ya parándose del sillón.

Pedro agarró a Paula del brazo y la tiró sobre el sillon de forma que ella quedo acostada en el mismo, Pedro se puso arriba de ella.

-Vos no te vas a ningún lado.-dijo Pedro teniendo a Paula a menos de 5 cm de su cara.
-Todo lo que va, vuelve.-dice Paula.

CUENTA PAULA:

Escuche a Pedro contar casi toda nuestra historia y me emocioné, escuchar de sus labios que yo era lo más importante de su vida me erizaba la piel, con Pedro todo era distinto, no era como mis otros novios, claro, él era mi esposo, dicen que cuando las parejas se casan se arruina todo, pero acá era distinto parecía como si nos estuviéramos conociendo, como que Pedro me llevaba a su casa a escondidas y vivíamos una aventura. Pensar que en dos días volvíamos a las calles de Buenos Aires con todo el tráfico, la gente que va de un lado para el otro, el trabajo, las notas, el bailando, solo con pensarlo me dolía la cabeza.
Lo único que me daba alegría de volver a Buenos Aires era que iba a ver a mi bebe, como la extrañaba, necesitaba tenerla en mis brazos, abrazándola, dándole besos, la extrañaba muchísimo.
Volviendo al tema, estábamos en el medio de la tormenta, con apagón, sin ver nada.
Después de la "declaración" de Pedro se me cayeron unas lágrimas, lo amaba tanto, amaba cuando las palabras le salían del corazón, su cara, era muy tierno. Me senté arriba de él y lo comencé a besar hasta que me detuvo, ofendida me levanté del sillón yéndome a dormir, pero algo tiro de mi brazo y en menos de un segundo estaba acostada en el sillón con Pedro arriba mio.
Empezó besando mi boca, luego siguió por el cuello, mi debilidad, yo respondía a sus besos, nuestros cuerpos se conectaban, apenas le veía la cara solo cuando un rayo iluminaba la casa veía su rostro besándome.
La ropa empezó a formar parte del decorado, en fin ... hicimos el amor, esta vez en el sillón.
Al otro día me desperté, abrí los ojos, yo estaba arriba de Pedro... en el sillón, era una situación rara, el cielo estaba oscuro, la casa estaba oscura y eran las dos y media de la tarde, había ropa tirada por todos lados, mire mi alrededor desde la misma posición, a unos pocos centímetros tenía la cara de Pedro, yo estaba con una camisa de él y Pedro bueno.. Pedro estaba de boxers, reí en voz baja, en silencio, me causaba gracia, en ese momento Pedro abrió un ojo, levanté mi mirada y vi como me miraba, me estiré unos centímetros y le di un beso en la mejilla.
-Que pasó, que hago acá?.-dice Pedro
-Mmm, no te acordas de nada?-dice Paula triste.
-No
-Me estás jodiendo, no te acordas la noche hermosa que tuvimos?.-dice Paula.
-Que? que hicimos?-dice Pedro.

Paula se quedó mirando a Pedro con ganas de pegarle.

-Obvio que me acuerdo mi vida....-dice Pedro riéndose.
-Aaa pancho.
-Jaja te amo.
-Yo no.
-Dale ahora no te hagas la difícil.
-Te amo mucho mucho mucho mucho ( beso ).
-Desayunamos?.-dice Pedro.
-Son las dos y media de la tarde yo diría de comer ya.-dice Paula.

Pedro se ríe y se levanta.
-Ah y haceme un favor, ponete los pantalones.-dice Paula.
-Y vos ponete una remera y dame mi camisa, no me provoques más.

Paula se acerca a Pedro y lo abraza.
-Yo te provoco?
-Si
-Te amo.-dice Paula y lo besa apasionadamente.

CONTINUARÁ...

"El Poder del Amor" Capitulo 100 - Rubia Hermosa

El cielo se empezó a cubrir de nubes, el aire ya estaba fresco, las estrellas no se veian, y una neblina cubría las sierras.

-Gordo vamos?.-dice Paula.
-Si vamos, me parece que se larga a llover en cualquier momento.-dice Pedro

Caminaron rápido hasta la casa, por suerte todo estaba bien, entraron, cerraron todo y se quedaron sentados en el sillón mimándose.
Ambos mirando por la ventana podían observar como se aproximaba la tormenta, relámpagos y rayos a lo lejos que no dejaban de caer y de sonar.
Paula mira a Pedro.

-Qué?.-dice Pedro.
-Miedito.-dice Paula.
-Jaja no le podes tener miedo a las tormentas.
-Por qué no puedo?
-Ya estas grande Paula.
-Pareces mi padre Pedro.
-Y bueno, algo tengo que hacer contigo...
-Jaja, dale ahora te crees el padre... lo que faltaba.

Pedro besa a Paula.

-Y eso?.-dice Paula.
-Y eso qué?
-No se, el beso, ta dejalo ahí.
-Ahora te tengo que pedir permiso para besarte?
-Si hay que sacar numero.
-mmm sonó raro.
-Callate Pedro.
-Que raro que llueva no?, así de golpe, estaba re linda la noche.-dice Pedro abrazando a Paula en el sillón.
-Pasa que como lloró el hombre más hermoso del mundo, se enojaron los angelitos...-dice Paula acercándose a Pedro hasta que quedo a 5 cm de su cara.
-No me gusta verte llorar, me pone mal, es raro es como que si estuvieramos conectados, como si sintiera lo mismo que vos, una sensación acá ( poniendo su mano en su pecho ) que me provoca una angustia tremenda.-dice Paula.
-Estamos conectados... siempre lo estuvimos.
-Yo se que si.

En ese momento, una luz violeta inundó toda la casa acompañada de un estruendo, instantáneamente se apagaron todas las luces de la casa.

-La pu* madre, apagón.-dice Pedro.
-Naa enserio, jodeme?.-dice Paula riéndose.
-Estas chistosa últimamente.-dice Pedro.
-Che gordo como que van a ser las cuatro y media de la mañana no tenes sueño?
-No, dale un rato más!

Paula se ríe.

CUENTA PAULA:
Era graciosa la situación, Pedro diciendo que había apagón cuando en realidad era obvio, después como un nene chico diciendo que no se quería ir a dormir. Pero a la vez yo tampoco me quería ir a dormir, quería estar con él, no se porque, tenía una sensación adentro que me decía que este era un momento importante.

-

-Gordo, no sentís como que estamos raros?.-dice Paula.
-Que decís Paula?
-Si no se, como si nos estuviéramos conociendo, no se, nos decimos las cosas que sentimos por el otro, como si fuera nuestra primera noche juntos.
-Si no te las digo ahora cuando queres que te las diga?.-dice Pedro.
-Perdón? acá la que se expresó fui yo, no escuche ninguna declaración de su parte señor Alfonso.-dice Paula.
-Perdone señorita Chaves, quiere que se le declare?
-No estaría mal, a ver, largue todo.
-Bueno, le cuento,yo tenía una vida normal con mis padres en Marmol, hasta que se me ocurrió ir a un kiosko a comprar una gaseosa, una chica de un metro ochenta estaba atrás mio, tenía cara de apurada así que opte por darle mi lugar, al salir del kiosko esta misma chica me preguntó como me llamaba, ahí tuvimos una pequeña charla, digamos que fue amor a primera vista.
Después me invito a mirar una película a su casa, la misma noche si no me equivoco, me quede porque ella estaba nerviosa, miramos una romántica, la chica se puso a llorar y yo no lo podía creer, no pasaron ni 3 meses y ya nos habíamos acostado, la lleve a Carlos Paz, días increíbles pasé con esa chica, esa chica rubia, modelo, hermosa, esa rubia hermosa me dio una hija, se casó conmigo, y me hizo feliz, que decirle a esa chica? que la amo? no, porque es más que eso... que me cambió la vida? no, hizo mi vida ... en fin amor, sos todo lo que tengo vos y esa hija hermosa que me diste son lo más importante de mi vida, y no las voy a dejar nunca, son mi todo, vos sos mi vida, sos la batería que me hace seguir adelante, cada vez que me despierto y te veo te amo más, no se si te quedo claro, que esa chica sos vos, la más linda del mundo, esa rubia hermosa.

Paula dejó caer unas lágrimas.

-Que te pasa linda?.-dice Pedro
-Nada me emocioné... con lo que dijiste...
-Que te pasa amor? estás sensible...

Paula se subió arriba de Pedro y lo empezó a besar.
-Te amo ( beso) demasiado.-dice Paula sin dejar de besarlo, cada vez más.

" El poder del amor" Capítulo 99 - Nunca te olvides de eso

-Bueno gorda, vamos a casa?.-dice Pedro.
-Ya?.-dice Paula.
-Y si!, que queres hacer? si me decís que hay algún baile por acá te llevo, pero me parece que estamos en el medio de la nada.
-Nada de bailes.
-Bueno, como digas.
-Y vos.. como estás?.-dice Paula.
-Como estoy de que?.-dice Pedro.
-Como estas?, por el tema del Bailando, estás nervioso?.-dice Paula.
-Naaa.
-Dale, te conozco como la palma de mi mano, estás nervioso...
-Un poco, pero ni tanto...
-Va a estar todo bien, la vas a romper!.
-No es eso lo que me preocupa Paula, vos sabes bien...
-No, no se...
-Tengo miedo que esto no lleve a otra cosa, ya no voy a estar tanto tiempo en casa contigo y con Giuli, sabes lo que es eso para mi?.
-Pedro, vamos a estar todas las galas con vos, apoyándote.
-Pero no es lo mismo, me voy a las 8 de la mañana a ensayar, cuando yo llego a casa vos estas trabajando y Giuli está en lo de tu madre, después me voy de nuevo y vengo a las 2 o 3 de la mañana los días que bailo.
-Los días que bailas, que son 1 vez por semana maso menos, el resto lo tenemos para estar en familia, y lo vamos a saber aprovechar ese tiempo.
-Si yo se que si.
-Entonces que es lo que te preocupa?.
-Vos me preocupas, tengo miedo que esto desgaste la relación.
-Pedro vos me amas a mi?.dice Paula.
-Demasiado.
-Entonces que es lo que vamos a desgastar?, si nos amamos mutuamente ya está, entendés? .-Dice Paula desacomodandole el pelo a su gusto.

CUENTA PAULA:
Que decirle? él sabía que íbamos a estar apoyándolo siempre, no era la contención que necesitaba, él necesitaba saber que pase lo que pase yo iba a estar con él, después de todo no se iba 1 año a otro país, iba estar en un concurso de baile, cerca de nosotras, siempre, se notaba inseguridad en su cuerpo, seguramente se le irá pasando a medida que pase el certamen.
Digamos que yo tampoco estaba tranquila con su participación, es obvio que lo voy a extrañar muchísimo, que lo voy a necesitar, que lo VAMOS a necesitar, pero Pedro no necesita saber esto, solo necesita saber que ESTAMOS con él.

-Bueno ahora si, vamos?.-le dije.
-Si dale.-dice Pedro, con el autoestima bajo.
-Gordo te quedaste mal?.-le dije levantandole la cara con mis manos.
-No, nada más me puse a pensar en mi madre, a ella le hubiera encantado, estaría feliz, era llegar a casa y siempre me preguntaba como iba produciendo ShowMatch, y que ahora yo sea parte de esto, pero adelante de la cámara es mucho y que ella no esté..-dice Pedro, llenando todos sus ojos de lágrimas y dejando caer algúnas.
-Mi vida, ella está siempre, apoyándote, está acá.-le dije llevando su mano a su corazón.
-No lo voy a poder sobrellevar Paula, no puedo así, solo.
-Pedro estoy contigo, ella está contigo,está tu familia, estás con Giuli, no vas a estar solo nunca.
-Perdón...-dice Pedro secándose algunas lágrimas.
-Perdón por que?.
-Por llorar adelante tuyo, no me gusta llorar.
-Me estas jodiendo Pedro? no tenes que pedir perdón por nada, estoy acá para apoyarte en todas, para que soy tu esposa? para verte llorar, para verte sonreír y para estar en todos los momentos difíciles. Además...
-Además.. que ?.-dice Pedro.
-Sos hermoso hasta cuando lloras,tengo unas ganas de abrazarte y no soltarte más.
-Y bueno... no vendría mal uno de esos abrazos tuyos ahora.

Me pare del banco, estiré mi mano para que la tomara, él se levanto a mi lado, quedamos los dos pegados, mirandonos, buscando nuestra mirada interior, sentía su respiración en mi cara, supongo que el seniría lo mismo, le acaricié la cara secando sus últimas lágrimas y lo besé.
-Sos el hombre de mi vida, nunca te olvides de eso.le dije y lo volví a besar suavemente.

CONTINUARÁ...

" El poder del amor" Capítulo 98 - Así y de todas formas.

CUENTA PAULA:

Tenía miedo, desde que había recibido el mensaje de Fernando tenía mucho miedo, estaba asustada, pero preferí no decirle a Pedro, para que no se complicaran las cosas, para poder estar tranquilos los dos.
Salimos a caminar, cerramos bien las puertas de la casa y dejamos la luz prendida del living, empezamos a caminar, no había nada, solo un foco de luz cada 10 cuadras, la noche estaba tranquila, había un poquito de viento pero estaba agradable.
Necesitaba contarle a Pedro la verdad, de que estaba asustada, necesitaba decirselo a alguien, no quería guardarmelo para mi sola.
Opte por contarle, él me dijo que no tuviera miedo, que estaba con él, pero la vez anterior dijo lo mismo y terminó en el hospital.
A medida que seguíamos caminando me empece a relajar, nos sentamos en un banco que había a la orilla del lago y nos quedamos abrazados, el viento empezó a soplar más fuerte, hacía frío, él me abrazó, estaba tan calentito, era como un osito de peluche.

-Gracias.-le dije.
-Gracias por que?.-dice Pedro.
-Por esta noche hermosa que vivimos!
-Si la verdad que se podría repetir más seguido.
-Pedro!!
-Bueno Pau es la verdad!
-Jaja, para eso tendríamos que pelearnos más seguido, digo... porque siempre pasa despues de una pelea, es como una forma de mostrar arrepentimiento... o algo así.-le dije.
-Arrepentimiento? entonces te arrepentis de no haberme dicho lo del mensaje?.-dice Pedro.
-Obvio que sí!.-le dije.

Pedro me sonrió y me beso, un beso tras otro, empezó a bajar por mi cuello, yo respondía a sus besos de la misma forma, me empezó a acostar delicadamente en el banco, él encima mio seguía besandome, me iba debilitando, sus besos eran suaves pero llenos de amor, hermosos.
Pedro quiso sacarme la remera, todo iba perfecto hasta que abrí los ojos, estabamos en un banco, recalculé.
-Para gordo...-le dije.
-Que pasa?.-dijo Pedro sin dejar de besarme.
-Acá no!.-le dije sentándome en el banco y estirando mi remera.
-Si tenés razón, se me fue la mano.
Me empece a reír, me daba gracia la situación, era perfecto el lugar, pero no daba.
Me senté arriba de él, en su falda, y le prendí la camisa.
-Sos loco eh.-le dije riéndome.
-Loco por vos.-dijo Pedro.
-Yo se que sí!-le dije y lo besé.
-Aaa viste ! sos vos la que me provocas.
-Yo??.-le dije riéndome.
-Si me besas y me pongo loco.-dice Pedro.
-Jaja como te amo!.-le dije mirandolo a los ojos.
-Así? loco?
-Así y de todas formas, sos mi Peter ENDEMONIADO.

CONTINUARÁ...

"El Poder del Amor" Capitulo 97 - Tengo miedo

-Bueno vamos a dormir?.-dice Pedro.
-No! ya?.-dice Paula.
-Si gorda son las 2.30 de la mañana.-dice Pedro.
-Pero no tengo sueño.
-Si la verdad que yo tampoco.
-Que hacemos?
-Emm no se...
-Bueno entonces...
-Ya sé, y si vamos a caminar un rato?
-A caminar Paula?.-dice Pedro.
-Si querido eso que se hace cuando uno mueve las piernas.
-Ay que chistosa.-dice Pedro en burla.

Paula se ríe.

-Bueno dale vamos!

Salieron de la casa, era todo campo, una pequeña calle donde circulaba solamente su auto cuando era necesario, no había casi luz y el silencio inundaba el ambiente.

Paula caminaba de brazos cruzados, y Pedro con su mano izquierda rodeaba su cintura.

-Vos crees que él sabe que estamos acá?.-dice Paula.
-Quien?
-Fernando gordo...-dice Paula.
-No se Pau, nadie sabe que estamos acá solo nuestras familias y nadie más, o se entero por uno de ellos o nos siguió.
-Entonces vos decís que está por acá?.-dice Paula.
-Y si gorda, sabe que cambiamos la casa, sabe todo.
-Y vos me lo decís tan tranquilo?.-dice Paula alterada.
-Y que queres que haga Pau, que esté en guardia todo el día?.-dice Pedro.
-No, pero tengo miedo.-dice Paula, se detuvo y lo miró a Pedro.
-De que?
-De que pase lo mismo que la otra vez, Pedro vos no entedés que ese loco está enfermo? quiere matarte y quiere que me quede con él, es lo que busca.
-Si Pau, pero no va a pasar eso de nuevo, lo busca la policia, no puede andar corriendo por la vida.
-Hay Pedro, de esto la policia ya se olvidó, si acá ni existe la justicia.
-Bue.. ni tanto, ademas yo estoy con vos.
-Si Pedro, dijiste eso la vez anterior y terminaste en el hospital.
-Gracias por el apoyo.-dice Pedro desviando la mirada hacia el otro lado.
-Pero es la verdad gordo, yo se que estas, y lo valoro muchísimo, pero este tipo es capaz de cualquier cosa, yo me muero si te pasa algo, me muero enserio.
-Hay Pau, no digas eso... va a estar todo bien, escuchaste.
-Vení vamos a sentarnos acá un minuto.-dice Paula señalando un banco a las orrillas del lago.

Se sentaron los dos mirando las sierras.
-Es hermoso, tendríamos que venir a vivir acá.-dice Paula.
-No es mala idea.
-Hace frío no?.-dice Paula.
-Tenes frío?.-dice Pedro acariciándole la pierna a Paula.
-Un poco, pero si me abrazas se me va, seguro.-dice Paula riéndose.

Pedro la abrazó y se quedaron los dos sentados mirando el agua y las sierras en la tranquilidad de la noche.


CONTINUARÁ...

"El Poder del Amor" Capitulo 96 - Mi mundo

Pedro había cocinado asado al horno...
-Mmm que cocinas?.-dice Paula.
-Asado al horno... ya que no te hice un asado común te lo hago al horno.
-Mmm que rico.
-Recién dijeron en crónica que iban a pasar los mejores momentos de nosotros.-dice Pedro
-Eee me estas jodiendo? en crónica?.-dice Paula sorprendida.
-Si, por?.-dice Pedro.
-No por nada, me parece raro, igual, buenísimo a que hora es?.-dice Paula.
-A las 00:30, y son doce menos cuarto
-Bueno, mejor, comemos ahora y después lo vemos.-dice Paula.
-Bueno, dale, te animás a poner la mesa?.-Dice Pedro.
-Si obvio.-dice Paula.

Paula puso la mesa y luego le puso la comida a Moro para que comiera.
Se sentaron los dos en la mesa, comieron, lavaron los platos los dos juntos y se sentaron en el sillón a esperar el programa.

-Mira gordo, empezó...-dice Paula.

El programa duró como 2 horas, pasaron todo, todos sus momentos delante de la televisión, los juegos en la cocina del show, las previas en show match, las notas en diferentes programas y sobre todo los besos, todos sus besos.

Obviamente Paula se emocionó mucho, dejó caer unas lágrimas, Pedro también se movilizó pero no de la misma manera.

Cuando terminó el programa los dos estaban abrazados en el sillón con todas las luces apagadas, menos la televisión.

-Enserio somos nosotros los de la televisión?.-dice Paula.
-Jaja no se, a vos que te parece?.-dice Pedro riéndose.
-Te juro que no lo puedo creer, tanto pasamos? es como mirar esto y sentir que no somos nosotros, parece una historia de amor.. una película de amor.
-Y es... cada cosa que vivimos es un capítulo nuevo de nuestras vidas.
-Pedro yo soy un capítulo de tu vida?.-dice Paula.
-No, vos sos mi historia completa.-dice Pedro

CUENTA PAULA:

A medida de que pasaba el programa era menos creíble todo lo que vivimos con Pedro, pero era verdad, era todo puro, no había mentiras y a pesar de que había muchísima gente que no nos creía nosotros eramos y somos felices igual.
La verdad era que la primera vez que lo vi, en aquel kiosko supe de que él tenía algo especial, supe que iba a cambiar mi vida, sus ojos era distintos a los de otros, eran como llenos de vida.

-Que lindo no ?.-dice Pedro.
-Lo que ?.-le dije.
-Todo lo que vivimos y construimos juntos.-dice Pedro
-Si es hermoso, es como tener un álbum de fotos de todo lo que pasamos.
-La verdad que si.
-Todavía me acuerdo aquel día que llame a Sofía desesperada para que viniera a casa porque estaba confundida.
-Confundida? dale contame...-dice Pedro.
-Si confundida, hacía nada más 3 meses que nos conocíamos y ya había pasado todo tan rápido, ya habíamos tenido nuestra primera vez, ya habíamos hecho de todo juntos, ya me habías propuesto casamiento y en solo 3 o 4 meses.
-Es verdad... pasó todo tan rápido.
-Si y me acuerdo que Sofi me daba para adelante, decía que el tiempo no importaba, si había amor ya estaba!
-Y tenía o no tenía razón?.-dice Pedro.
-Si tenía mucha razón... pero bueno, estaba caprichosa de más en esa época ademas no si te acordas de que ahí ya estaba embarazada de Giuli, y todavía no les había dicho nada a mi padre y que tenía miedo de que me mataran te acordas?.-le dije riéndome.
-Si me acuerdo que estabas hecha un pollito mojado.
-Que tarado!-dice Paula subiéndose a la falda de Pedro.

Me lo quedé mirando embobada, lo amaba tanto.
-Te cuento un secreto?.-le dije.
-A ver, que me vas a contar?.-dice Pedro.

Me acerque hasta su oído y le dije:
-Le voy a gritar al mundo : Te amo!
Pedro sonríe y me dice:
-Entonces porque me lo decís susurrando?.
-Porque vos sos mi mundo.
-Te amo tanto ...- dijo Pedro.

CONTINUARÁ.....

" El poder del amor" Capítulo 95 - Todo era tan distinto, extraño.

Estuvieron un rato sentados hasta que se hicieron las 23:00 horas.

-Vamos a comer?.-dice Pedro.
-Si dale vamos, tengo un hambre!.-dice Paula.
-Bue... yo cocino.-dice Pedro.

Se levantaron, Paula fue hacia el baño, se bañó y se cambió mientras Pedro cocinaba.

CUENTA PEDRO:

Nunca mi vida había vivido algo así, tan hermoso, una sensación indescriptible, tan puro, tan perfecto, estaba con ella, y sentía tanto placer de que fuera mi esposa, todo lo que habíamos pasado, todo lo que habíamos vivido, y si, aunque esto parecía tan simple no lo era, era distinto a las otras veces, cada vez que la miro a los ojos siento que la amo cada vez más.
Verla conmigo, acostada arriba mio, los dos juntos era genial, la amaba tanto, ella lo sabía, claro, pero como decirle lo que en verdad pensaba, pensaba tantas cosas, nunca me exprese, y necesitaba hacerlo, teníamos una hija juntos, teníamos todo lo que queríamos, pero en verdad ella sabía lo que sentía por ella?

CUENTA PAULA:

Después de ese momento hermoso, quedé relajada, como en esos momentos en los que te puede caer un meteorito al lado y no te importa, era una sensación hermosa, perfecta. Nunca me había pasado algo así, miro a Pedro a los ojos y es como tocar el cielo con las manos, es como tener todo lo que quiero con solo mirarlo, como decirle todo lo que pienso de él? como expresar esas palabras, que simplemente eran indefinidas, indescriptibles, extrañas?

Salí del baño, me puse un short de jean con una remerita de manga corta, mi favorita. Me peiné, me até el pelo y me fui para la cocina, allí estaba Pedro, cocinando, había una aroma deliciosa en el ambiente, me acerque a él sin que se diera cuenta y lo asusté por atrás, él se dio vuelta sorprendido, me miró y sonrió y me regaló un beso.

CONTINUARÁ...
PERDÓN POR HACERLO CORTO, A LA NOCHE SI PUEDO HAGO OTRO. ESPERO SUS OPINIONES Y COMENTARIOS.

"El Poder del Amor" Capitulo 94 - Puedo confiar en vos ? Parte 3 ( Última Parte)

Paula vuelve al patio donde estaba Pedro, esta vez parado al lado de la pileta.
-Quien era? Te escuche reír.-dice Pedro.
-Era mi mamá.-dice Paula sonriendo.
-Como esta Giuli?.-dice Pedro.
-Barbara, se estaba riendo como loca, divina.
-Era de eso de lo que te reías?
-En parte.
-Mmm-dice Pedro.
-Jaja mi madre quiere un nietito dice...-dice Paula.
-Ah era de eso..
-Algo así.

Paula se fue acercando a Pedro lentamente, seduciéndolo, hasta que llegó a él.
-Vos que pensas?.-dice Paula.
-Y no se... dicen que a las madres hay que hacerles caso..-dice Pedro.

En eso, Paula le da un empujoncito a Pedro, él resbala y se cae en la pileta.
Paula se empieza a reír.
-Ah te crees graciosa?.-dice Pedro saliendo de la pileta.

CUENTA PAULA:

La verdad que cuando mi madre me dijo lo de tener otro hijo, quede helada, era el momento? Pedro querría ? Yo quería?. Hacia muy poco que habíamos tenido a Giuliana, y ahora Pedro no iba a estar tanto en casa, se me juntaron mil cosas en la cabeza.
Salí al patio y estaba Pedro junto a la piscina, le dije lo que me había dicho mi mamá, sus ojos brillaban, como si hubiera esperado ese momento hace años. Fue ahí que lo empece a considerar, era el momento perfecto... ahi nosotros solos, la noche perfecta, el lugar perfecto, con la persona perfecta.

Me fui acercando a Pedro, tratando de seducirlo, me quede a menos de 20 cm de su cara y le pregunte que pensaba de esto.
Luego para animar le di un empujón a Pedro, el resbaló y cayó a la pileta, comencé a reírme como una niña de 5 años que hace travesuras.

Pedro salió de la piscina en busca de venganza, yo empece a correr al rededor de la misma, él me perseguía, riéndose, hasta que al fin me atrapó, me tomó por la cintura, me levantó y me tiró a la pileta, él de tras de mi se tiro al lado mio.
Cuando llegue a la superficie, abrí los ojos y tenía a Pedro pegado a mi, podía sentir su respiración, y su corazón en mi pecho, nos quedamos como 3 segundos mirándonos, sus ojos prendían fuego, se comunicaban con los míos, hasta que recalculé y me di cuenta lo que estaba pasando... era obvio, estábamos allí los dos en la pileta, con la luna y las estrellas arriba nuestro, Pedro ya se había quedado con la idea de otro hijo, me deseaba con su mirada, yo estaba entregada a él. Me di cuenta que tenía frío, el agua estaba congelada, pero no iba a arruinar este momento con un capricho mio, me la banque.
Él se acercó a mi, cerré los ojos, sentía su respiración, sentía como sus manos rodeaban mi cintura delicadamente, hasta que sentí sus labios en mi cuello dándome besos, él sabía que eso era mi debilidad, mi punto débil, comenzó a besarme apasionadamente, yo respondí a sus besos, el agua congelada ya no me preocupaba, no sentía nada, solo sus besos y sus caricias, nuestros cuerpos se conectaban, como si fueran compatibles, me dejé llevar y le empecé a sacar la remera mojada a Pedro, él hizo lo mismo con una remerita que tenía yo arriba de la bikini, continuaron los besos, la ropa flotaba en la pileta, estábamos los dos desnudos, ahi bajo la oscuridad de la noche. Se me pasaban mil cosas por la cabeza, que estaba haciendo, si, era mi hombre, estaba con él, pero y si quedaba embarazada de nuevo? tan pronto?, mil preguntas se me pasaron por la cabeza, pero a pesar de eso mi cuerpo seguía respondiendo igual, en ese momento no hubo más besos, no hubo más nada, solo nuestros ojos mirándose nuevamente.
Saque mi mano de abajo del agua y le acaricié la cara, sin dejar de mirarlo.
Él tomó mi mano y me miró.
-Es el momento?.-me dice Pedro.
Yo sinceramente no sabía que decirle, hasta que dije, esto ya está todo hecho.
Simulé un si con la cabeza y le regalé una sonrisa, él me miró y me sonrió, comenzó a besarme nuevamente en el cuello y así fue, hicimos el amor en una pileta, a la luz de la luna.
Luego de ese momento hermoso, estábamos los dos nuevamente en la reposera, yo arriba de él.
Lo miraba embobada, era impresionante cuanto lo amaba, era mi todo, él lo sabía, pero de manera distinta, era mi todo, mi vida, mis sueños, mi mundo, me quede mirándolo mientras él miraba el cielo, me quede pensando en que haría sin él, que hubiera pasado si en el atentado que hizo Fernando él hubiera muerto... un frió me recorrió todo el cuerpo y se me puso la piel de gallina.

-Que pasa amor?.-dice Pedro.
-Nada, me vino frío.

Pedro estiró su brazo, agarró su toalla y me tapó.
-Gracias lindo.-le dije y lo besé.

Él me miró y me dijo:
-Puedo confiar en vos?
-Siempre.-le dije y lo besé nuevamente.
CONTINUARÁ...

" El poder del amor" Capítulo 93 - Puedo confiar en vos ? Parte 2

Paula lo beso a Pedro con todas sus fuerzas, con todo su corazón, y con todo su amor.

CUENTA PAULA:
Pedro me pidió que le demostrara que aun podía confiar en mi, él es MI hombre, y el tiene que confiar en mi, pensé, entonces enseguida lo agarre y lo bese como nunca, sentí que Pedro respondía al beso, como nuestros labios se conectaban, era perfecto.

Después de unos minutos, me aparté de él, lo miré a los ojos y le dije:
-Vos no entendes que sos lo más importante que tengo?, vos y Giuli con mi vida, son mi mundo, necesito que confíes en mi, hice mal en no decirte, pero yo se como funciona esto, íbamos a estar preocupados los dos, asustados, y yo quiero que estés tranquilo, ahora más que nunca, necesito este tiempo para estar con vos, felices, tranquilos, amandonos, sin preocupaciones,si?

-Si, te entiendo ...-dice Pedro.
-Perdoname.-dice Paula besandolo.
-Te perdono, me prometes que nunca más me vas a ocultar las cosas.
-Si te lo prometo, pero vos jurame que nunca más me vas a tratar así y menos que vas a volver a empujarme como lo hiciste...-dice Paula.
-Si te lo juro, y perdoname por eso, estaba re caliente, no te tuve que haber hecho eso.

Paula le sonríe.

-No me quiero pelear con vos, me hace mal.-dice Paula.
-A mi tambien.
-Te amo... te amo mucho.-dice Paula besando a Pedro.
-Yo tambien...-dice Pedro.

Los dos estaban abrazados, Paula abrazaba a Pedro por el cuello y el lo hacia por la cintura, besándose fueron caminando hasta la reposera donde estaba sentada Paula anteriormente.
Pedro se sentó en ella y Paula arriba de él, seguían besándose apasionadamente.

La noche estaba hermosa, estaba todo tranquilo, solo se veían las sombras de los arboles y de las sierras, y la única luz que estaba prendida en el patio, donde ellos estaban.

Quedaron los dos acostados en la reposera, mirando las estrellas, Paula apoyada en el torso de Pedro y él acariciándole el pelo a Paula.

-¡¡¡Mira gordo!!! una estrella fugaz!!
-¡¡Dale!! pedí un deseo.

Paula cierra los ojos, se acerca a Pedro y le dice en el oido:
-Deseo estar toda mi vida con el hombre que amo, deseo estar toda mi vida con vos, besandote, cuidandote, respetandote y amandote SIEMPRE!

Pedro la mira y sonríe.
-Te amo mucho .-dice Paula.
-Te amo.-dice Pedro y la besa.

En eso suena el teléfono.

-Dejá voy yo.-dice Paula.

Paula prendió la luz del living y atendió el teléfono.

-Pau ?
-Ah , hola Mamá .-dice Paula.
-Como andan?.-dice Alejandra.
-Bien acá, la estamos pasando barbaro.-dice Paula.
-Me alegro.
-Como esta mi nena?.
-Divina, recién terminó de comer y ahora está tu hermana con ella, se ríe como loca.
-No te das una idea de como la extraño.
-Yo se que si Pau, pero aprovecha este momento, es importante, Pedro necesita apoyo, te necesita más que nunca.
-Ma, Pedro va a entrar a un concurso de baile, no a Gran Hermano.
-Ya se linda, pero es importante que estes con él, acordate que no se van a ver tan seguido de ahora en más.
-Si, ya se, lo voy a hacer feliz!.

Paula escucha la risita de Giuliana por el teléfono.

-Hay como se rie la gorda, que divina!.-dice Paula.
-Si la verdad que mi nietita es un sol, como vos, tendrías que darme otro nietito, no te parece?.
-Hay mamá por favor, andá con Giuli y con Delfi, haceme el favor! .-dice Paula riéndose.
-Bueno hija, pásenla lindo.
-Gracias mami, llena a Giuli de besos por mi y decile que la amo y que la extrañamos mucho con Pedro!, Besos.

Paula corta la llamada telefónica.


CONTINUARÁ...

" El poder del amor" Capítulo 92 - Puedo confiar en vos ? Parte 1

CUENTA PAULA:
Al verlo ahí solo, pensé en no molestarlo, pero tenía ganas de abrazarlo de besarlo, sentado ahí, bajo el cielo, era hermoso.
Me acerque lentamente y me senté en una raposera de madera que estaba junto a él, Pedro no movió ni un pelo, no dijo nada, ni siquiera giró la cabeza para mirarme.
Yo tampoco le hable, solo atiné a mirarlo, traté de descubrir en su rostro que le pasaba, pero en su cara solo había tristeza.
Odiaba que él no me hablara, odiaba que él no estuviera conmigo, odiaba no saber que le pasaba, tanto de eso que se me cayó una lágrima, fue ahí que Pedro me miró, yo con la cabeza hacia abajo con todos mis pelos tapándome la cara, vi que una mano se acercó hasta mi rostro y me hizo una caricia secándome unas lágrimas.
Enseguida levante la cabeza, él me miraba, sin producir ni un gesto con su cara, solo me miraba fijamente.

No sabía que hacer, no sabía si seguir llorando, o si bien hablar, al instante me vino un impulso, me senté arriba de él rápidamente y lo abracé con todas mis fuerzas, no entendía por qué lo abrazaba, si total ni si quiera sabía por qué estaba enojado, pero solo con abrazarlo me sentía pura, el respondió con un abrazo, enseguida sentí sus manos rodear mi cintura y me tranquilicé.

CUENTA PEDRO:

Vi a Paula acercarse lentamente hacia mi, se sentó en una reposera de madera que estaba a mi lado y me miró, yo en cambió no hice lo mismo, seguí mirando el cielo, contemplándolo.
En ese instante noté que algo en Paula andaba mal, noté que unas lágrimas brotaban de sus ojos, ella bajó la cabeza llorando.
Acerque mi mano, le corrí el pelo de la cara y le hice una caricia en su rostro.
Paula enseguida me miró y en menos de un segundo estaba sentada en mi falda abrazándome como si no me hubiera visto desde hace un año. Su abrazo era tan fuerte pero tan suave a la vez, era puro, era como decirme perdón de manera distinta. Fue por eso que la abrase, desde que le había gritado en la pileta tenía ganas de abrazarla.

-

Paula levantó la cabeza y se quedó mirando a Pedro a los ojos, con su mano le empezó a acariciar el pelo, como haciéndole rulitos:
-Que pasa gordo? que te hice? .-dice Paula.
Pedro la miró y le secó unas lágrimas con su mano.
-Paula, odio que me oculten las cosas, y más que vos me las ocultes...-dice Pedro.
-Pero.. ocultarte? ... ocultarte que?.-dice Paula confundida.
-Vos sabes bien Pau, me llegó un mensaje de Fernando, diciendo que no tenía que confiar en vos que vos me ocultabas las cosas, y que me habías ocultado un mensaje que te mandó, y era verdad, tenías un mensaje de él, y no me dijiste nada.

Recién ahí fue que a Paula le cayó la ficha.

Pedro se levantó de la silla, y se fue para adentro, antes Paula trató de detenerlo.
-Pedro... pará...-dice Paula.
-No Pau, ya está!.-dice Pedro.
-Que queres decir?
-Quiero decir que ya no se si voy a confiar en vos...
-Que decís Pedro?
-Me ocultas las cosas Paula, es lo que más detesto, que me ocultes las cosas.

Pedro se dio vuelta, caminó tres pasos y enseguida sintió una mano que lo tomaba del brazo, se dio vuelta,al darse cuenta tenía a Paula a menos de 40 cm.

-Enserio no confias en mi?.-dice Paula llorando.
-No se...-dice Pedro.
-Perdoname Pedro... pasa que ..
-Que pasa Paula? no te entiendo, si no me contás las cosas vos que sos mi mujer, quien me las va a contar?.- dice Pedro enojado.

Paula le agarra la cara a Pedro con sus manos suavemente.
-No entendes que trato que estos días sean los mejores?, no entendes que no quiero preocuparte?, Pedro, quiero que estos días sean los mejores, no quiero arruinarlos.
-Pero ya los arruinaste Pau...-dice Pedro.
-No seas así conmigo...-dice Paula.
-Demostrame que puedo confiar en vos.-dice Pedro.

Paula lo miró aún con lágrimas en los ojos, lo tomó de la cara y lo besó, lo beso como nunca, quería demostrarle que aún podía confiar en ella.

CONTINUARÁ...

"El Poder del Amor" Capitulo 91 - Te tengo muy cerca.

CUENTA PAULA:
Todo estaba perfecto, ya me había puesto la bikini para entrar a la pileta, cuando veo que mi celular vibra, enseguida lo desbloqueo y leo : MENSAJE NUEVO.
Lo abrí:

"La verdad que no se que te gusta de esa casa, no le veo nada lindo, me parece que tu marido no tiene muy buen gusto, conmigo sería todo distinto, que lástima que no me quieras, igual no te extraño, te tengo muy cerca." Fernando.

Cuando leí el mensaje se me puso piel de gallina, se me pasaron mil cosas por la cabeza, como sabía él donde estaba yo, como sabía lo de la casa, y esas úlitmas 4 palabras eran escalofriantes "Te tengo muy cerca". Opte por no decirle nada a Pedro, no quería ponerlo nervioso, quería que estos días sean perfectos, y no quiero que nada los arruine.

Salí al patio y me metí en la pileta, el agua estaba templada, había un poco de viento, pero estaba bien, Pedro todavía no se asomaba, seguramente seguía en el baño, pensé.

CUENTA PEDRO:

Apenas salí del baño me puse el short, agarré una toalla y marche para la pileta, cuando estaba pasando por el living, sonó mi celular, lo abrí había un cartel que decía MENSAJE NUEVO.
" Ojo con lo que no te cuenta tu esposa, que lástima que no vas a poder estar tanto tiempo con ella, capaz que si le lees el último mensaje recibido te vas a dar cuenta, despues no digas que ella confía y cree en vos" Fernando.

Quedé pensativo, encerio Paula me estaba ocultando algo?, pensé. Miré por la ventana, ella estaba en su mundo, dentro de la pileta, miré la mesa y vi su celular, no pude resitr, tomé su celular y leí su último mensaje recibido. Al leerlo, no me quedó todo en claro, solamente que Paula me lo ocultó, odio que la gente me oculte las cosas. Miré nuevamente por la ventana Paula seguía allí. Opte por no hablar del tema todavía, aunque en mi cara se notaba que algo no cerraba, enseguida coloque el celular de Paula en la mesa y me fui a la pileta.

-
Paula se da vuelta y ve a Pedro.
-Gordo, donde estabas? hace mil que te estoy esperando.-dice Paula.
-No nada, me llamó un amigo.
-Ah, que raro, no escuche el telefono.

Pedro la ignoró con la mirada.
Paula empezó a tirarle agua a Pedro, salpicandolo, él solo se tapaba, y no deja salir ni una sonrisa, Paula lo notó raro y se acerco y le empezó a hacer cosquillas.
-Que haces Paula?.-dice Pedro, aparándola.
-Que hago de que?, que te pasa ?.- dice Paula un poco molesta.
-No me pasa nada.-dice Pedro alterado.

Paula siguió haciendole cosquillas a Pedro.
Pedro la apartó, empujándola.
-Basta Paula no jodas! .-dice Pedro gritando.
-Que haces?- dice Paula sorprendida por el acto de Pedro.-Que te pasa mijo?, que carácter de mierda que tenes!.-dice Paula, levantándose, y saliendo de la pileta.

CUENTA PAULA:
No entendía lo que le pasaba, sabía que Pedro era cambiante de humor, pero ... él nunca había llegado al punto de empujarme y gritarme así.
Me encerré en la habitación, estaba sensible entonces atiné a llorar.
Después que me calmé un poco, me enganche con una película, siempre con la puerta cerrada de la habitación, hacía 2 horas y media que no se abría, yo en cambio, seguía esperando a Pedro atravesar la puerta pidiendo disculpas, pero eso no pasó.

Se hicieron las 9 y 30 de la noche, la casa estaba en silencio, empece a tener hambre, entonces me seque las últimas lágrimas y abrí la puerta. Mire a los costados, estaba todo apagado, solo estaba prendida una luz en el patio al lado de la pileta. Cruce el comedor, todavía con la bikini puesta, pase por al lado de los perros que dormían, y llegué a la puerta que conectaba el patio con la casa. Miré hacia la luz, estaba Pedro sentado de espaldas a la puerta mirando hacia arriba, seguramente estaría mirando las estrellas, pensé.

CONTINUARÁ.......