Paula dejó el teléfono en la mesa y saludó a Pedro.
-Hola lindo, como te fue?-dice Paula.
-Bien por suerte, me volvieron a insitir con lo del bailando 2012.-dice Pedro.
-Otra vez? Que pesados, y vos que dijiste?-pregunta Paula.
-Y que voy a decir Paula, que no.-dice Pedro casi gritando.
-Bueno mijo, baja un cambio, a mi no me grites-dice Paula.
-Es que estoy a mil Paula, no puedo más, que voy, que vengo, que me llaman, que a donde voy siempre hay una cámara grabandome…la verdad nose.
-No entiendo Pedro, que es lo que no sabes?-pregunta Paula.
-No se si casarnos sea una buena idea.
-Pedro vos me estas jodiendo a mi?-dice Paula.
-No, Paula, vos pensá que nunca más vamos a tener una vida privada.-dice Pedro.
-Enserio eso es lo único que te importa? Tu vida privada?.
-Y que queres que haga?
-Pensé que al menos yo te importaba.-dice Paula.
-Hay Paula, obvio que me importas, pero podemos esperar un poco más.
-Hace lo que quieras Pedro, total acá siempre haces lo que vos queres-dice Paula.
-Que decis?.
-Si, digo que el casamiento podrá esperar todo lo que vos quieras, pero tu hija, nuestra hija, no puede esperar y falta muy poco para que nazca, y vas a tener todos los medios arriba, al igual que yo, y te la vas a tener que bancar, porque te guste o no, ella va a nacer.
-Deja, no entedes nada…-dice Pedro.
-No te entiendo a vos Pedro-dice Paula casi gritando.-la verdad últimamente me das a entender….
-Que te doy a entender?-dice Pedro.
-(…) me das a entender que ya no me queres, o que te importo menos que antes.-dice Paula.
-Enserio pensas eso?
-Últimamente si-dice Paula.
-Como vos digas.-dice Pedro, ya no dándole atención.
-Andate a la mierda Pedro.
Paula se fue casi llorando a su habitación y cerró la puerta.
Por su lado Pedro, se puso a jugar a la play, no cenó, Paula no salía del cuarto, Pedro notaba que algo andaba muy mal, las últimas palabras de Paula todavía flotaban en su cabeza como un eco.
Ya eran las 23:45, Pedro tomó una frasada y durmió en el sillón del living.
Al otro día se levantó a las 6:30 de la mañana, le preparó el desayuno a Paula, lo dejó en la mesa y le escribió una carta, pasó por la habitación, ella dormia, le dio un beso en la mejilla y la tapó.
Como dos horas después Paula se levanta, va a la cocina y ve todo el desayuno preparado, ella sonrié, enseguida tomo la carta que estaba sobre la mesa y la abrió:
-Paula:
Perdoname por lo de anoche, no tuve un buen día y me la agarré con vos, obvio que te sigo amando más que a nada en el mundo, y que sos la persona más importante en mi vida, y sos la persona con la que me gusta estar y la que me hace muy feliz.
Perdoname, nunca más te voy a volver a tratar así.
Te amo con todo mi corazón:
Pedro.
Y junto con la carta había una pequeña frase:
Paula dejó caer las lagrimas que tenía guardadas de la noche anterior, tomó su celular y llamó a Pedro.
Pedro: Hola?
Paula: Yo tambien te amo muchísimo, perdoname vos a mi.
Pedro: Pau? Leiste la carta?
Paula: Si la lei.
Pedro: Perdoname enserio te digo no estuve mal estuve espantoso, no te mereces que te trate así, perdón la verdad ayer no fue mi mejor día, sabes que te amo, vos lo sabes.
Paula: Si lo se, por eso te llame.
Pedro: Hoy voy a las 4 a casa, me voy que me llama el Chato.
Paula: Pedro…
Pedro: Que pasó?
Paula: Te amo mi amor.
Pedro: Yo muchísimo más.
Así fue, todo ya estaba más que bien y los días seguían pasando y las fiestas ya estaban en las agendas de los dos.
24 de diciembre de 2011
22:30
Ya estaban todos, la familia de Pedro, la de Paula y algunos amigos sentados en la mesa, brindando.
Los niños de la familia se entretenian tirando pequeños fuegos artificiales o jugando con Moro, mientras los adultos hablaban de trabajo, viajes y obviamente de Giuliana.
En un momento Paula fue a buscar un saco a su habitación, Delfina, su hermana sale detrás de ella.
Ya en la habitación.
-Que haces Pepi?-pregunta Paula.
Delfina abrazó muy fuerte a Paula.
-Sabes que sos la mejor hermana mayor de todo el mundo?-dice Delfina.
-Vos sos mi todo-dice Paula.
-Ya no vas a venir más a visitarme cuando nazca Giuli no?-pregunta Delfina.
-Obvio que voy a ir, no me digas que mi hermana preferida está celosa?-dice Paula.
Delfina le sonrie.
-Dale, atrevida, vamos para afuera.-dice Paula.
Faltaba muy poquito para Navidad, así que se fueron todo para el frente de la casa y empezaron a tirar los primeros fuegos artificiales.
24:00
El cielo estaba totalmente iluminado, muchísimos colores se reflejaban en los ojos de cada uno de ellos.
Paula abrazada por Pedro, observaba el maravilloso espectáculo que había haya arriba.
Pedro al igual que Paula estaba sorprendido, él abrazaba a Paula lo más fuerte que podía y apoyaba su cabeza en el hombro de Paula y en cuanto podía le daba un beso en el cuello.
-Gracias-le dice Paula a Pedro.
-Por qué?-pregunta Pedro.
-Gracias por formar parte de el año más feliz de toda mi vida.-dice Paula.
Pedro agarró a Paula y le dio un beso muy apasionado, en ese momento solamente eran ellos, el cielo iluminado y los ruidos que provocaban los fuegos artificiales, nada más.
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