" El poder del amor" Capítulo 103 - Un día triste

Pedro comió todo, de última no estaba tan mal, pensó.
Despues de comer, lavaron los platos entre los dos, Paula lavaba y Pedro secaba.
-No me quiero ir gordo...-dice Paula.
-Si, yo tampoco.
-Y si nos venimos a vivir a acá?.-dice Paula.
-Paula, vos me estás hablando enserio?.-dice Pedro.
-Si, enserio.
-Pero... no podemos, por el bailando y todo...-dice Pedro.
-Si ya se gordo, te digo después.
-No se, más adelante vemos.
-Llamé a mamá, dice que Giuli se está portando muy bien.-dice Paula sonriendo.
-La extrañas no?.-dice Pedro.
-Si muchísimo, vos no?
-Si, obvio que si!
-Pedro... vos me trajiste acá porque te lo dijo mi madre?.-dice Paula.
-E? no, que decís?
-No se, porque mi madre dice que necesitabamos un tiempo para nosotros solos, y por ahi fue idea de ella.
-No... toda mia, todo fue idea mia.
-Bueno torito.. no te me pongas celoso.
-Jajaja, no me pongo celoso.
-Mmmm

Terminaron de lavar los platos.

CUENTA PAULA:
La verdad que de solo pensar en vivir en esta casa se me iban todos los problemas, las sierras, la tranquilidad, la pileta, las estrellas, era todo lo que necesitaba. Pero antes estaba el bailando, y tenía que estar en Buenos Aires para apoyar a Pedro, así que quedará para más adelante.

Nos acostamos un rato en la cama, yo leía un libro mientras Pedro miraba una serie en la televisión, afuera no dejaba de llover, seguían los truenos y los rayos, un día triste.

Pasaron las horas, entre algúnas cosas, dejó de llover, el cielo se despejó, empezaron a salir las primeras estrellas, se puso lindo.

-Gordo, si vamos al centro de Carlos Paz, a ver que onda...
-Está lleno de gente Pau, nos van a matar...
-Dale, que te cuesta.

Fue así que lo convencí, ya eran las 9 y media de la noche, cenamos en casa, dejamos a Moro adentro y fuimos para el centro.
No había mucha gente, quedaban solamente algunas obras en marquesina y no mucho más, caminamos un rato, se acercaron algunas fans a sacarse fotos y pedir autógrafos. Paramos en la puerta de un teatro a ver que había en sala, el teatro era el Candilejas, miramos algunas cosas en cartelera y nos fuimos.
Ya en la ruta Pedro detuvo el auto, en el medio de la nada, en realidad si, en el medio de la oscuridad.
-Que pasa gordo?-dice Paula.

Pedro se agarraba la cabeza.
-Gordo que pasa?.-dice Paula un poco alterada.
-Me maree.
-A ver mirame...

Cuando lo vi a Pedro algo andaba mal, estaba pálido.

-Estas pálido mi amor.

Puse mi mano en su frente para ver si tenía fiebre, y si, la cabeza le hervía.
-Tenes fiebre gordo, vení sentate acá que manejo yo.
-No deja gorda...
-Si Pedro, cambiate de lugar, dale gordo, no podes manejar así, estas que volás de fiebre.

Pedro se cambió de lugar y maneje yo, llegamos a casa.
-Andá, date una ducha de agua fría que te va a hacer bien.-dice Paula.
-mmm, solito?
-Ja, vos sos atrevido hasta con fiebre.-dice Paula.

Me acerque hasta él y lo bese.

-Queres que me bañe con vos?.-dice Paula tiernamente.
-Si, podrías...
-Soy tan buena que voy a ir.

Ya en la ducha, agarré y le toque la frente, seguía hirviendo.
-Vení, ponete abajo del agua fría.

Pedro se puso abajo del agua helada, en eso se da vuelta y me agarra de la cintura...
-Que haces Pedro?

Me empezó a besa abajo del agua y en ese momento...

CONTINUARÁ...